Fumar es
un factor de riesgo en el desarrollo del cáncer oral.
El tabaco no sólo puede producir
ennegrecimiento de los dientes y, como consecuencia, problemas de índole estética, sino que agrava también las posibles infecciones bucales y el desarrollo de otras patologías que pueden desembocar
en enfermedades graves.
De esta forma, fumar es también un factor que puede contribuir al desarrollo de infecciones como la inflamación de encías y la periodontitis; de hecho, el tabaquismo y la diabetes triplican el riesgo
de padecer esta enfermedad.
En el caso del cáncer oral, debemos insistir en la importancia de la detección precoz y en la necesidad de realizarse auto exploraciones y asistir al dentista cada seis meses, con el fin de detectar
cualquier anomalía lo antes posible.
Somos
tu dentista de confianza.